Equilibrado de precisión

Equilibrado perfecto de los neumáticos con la mejor máquina del mercado

El objetivo del equilibrado de los neumáticos es distribuir el peso de forma equitativa por todo el perímetro del neumático. Cuando las ruedas no están equilibradas, pueden provocar incómodas vibraciones durante la conducción. También tienen como resultado el desgaste prematuro de los componentes de suspensión y de dirección, de las piezas giratorias y de los neumáticos.

A la hora de volver a poner un neumático en una rueda, Continental recomienda que se vuelva a equilibrar el neumático correctamente para ayudar a eliminar la vibración y a evitar el desgaste prematuro ocasionado por el desequilibrio del montaje de la rueda giratoria y del neumático.

Como parte del mantenimiento rutinario del vehículo, los conductores deberían equilibrar los neumáticos de sus vehículos tras cada 5000-10 000 km recorridos, o después de 1 o 2 años (lo que ocurra primero).

También vale la pena equilibrar los neumáticos y las ruedas:

al comprar nuevos neumáticos, llantas o ruedas;
al rotar los neumáticos;
al reparar los neumáticos, o
cuando el coche atraviesa un gran bache.
Otra cosa que se debe tener presente es que el equilibrado de los neumáticos es completamente diferente a la alineación de las ruedas, si bien ambos conceptos a veces se confunden. Alinear un juego de ruedas implica ajustar sus ángulos para que estén paralelas entre ellas y en perpendicular con el suelo.

En Autoservice El Espinar somos expertos en equilibrado de ruedas y usamos siempre equipamiento de última generación para obtener un equilibrado perfecto. No dudes en contactarnos para un presupuesto personalizado.

Conocer los signos de desequilibrio
El desequilibrio de los neumáticos también puede desarrollarse con el tiempo a medida que se desgasta el dibujo con el uso habitual y cambia la distribución del peso. Sin embargo, someter a los neumáticos a un esfuerzo excesivo al conducir por carreteras en malas condiciones, al dar frenazos y al tomar curvas cerradas pueden acelerar el proceso.

Cuando uno o más neumáticos de tu vehículo no están equilibrados, hay varios indicadores comunes:

El coche experimenta vibraciones a altas velocidades.
El dibujo del neumático tiene un desgaste irregular.
Hay un aumento en el consumo de combustible.
Hay problemas con la suspensión.
Si notas alguno de estos síntomas (incluso aunque los neumáticos sean relativamente nuevos), es posible que tu coche tenga un neumático desequilibrado.